Ana María Campos

Mujeres nacidas en los Puertos de Altagracia, hicieron con su ejemplo que el Zulia entrara a las paginas de la historia por la puerta grande, es así como María Alejandrina Faría nos trajera en su vientre al Brillante General Rafael Urdaneta, Domitila Flores quien con su coraje y gallardía prefirió la muerte antes de entregarse a los enemigos de la patria y Ana María Campos que con su espíritu idealista y su claridad de pensamiento desencadeno el inicio del final para la presencia española en territorio Venezolano.

Ana María Campos nació en los Puertos de Altagracia el 2 de Abril de 1796, hija de Don Domingo Campos y Doña Ana María Cubillán, esta familia era una de las mas distinguidas de la época, hermana del Dr. León Campos, quien era director de la oficina revolucionaria por los derechos del hombre, conocida también como escuela de cristo y quien murió en Puerto Cabello preso por causas de sus luchas en pro de la causa patriota.

Corría el año de 1823, Francisco Tomás Morales Capitán General de Venezuela, ocupaba a Maracaibo, uno de los últimos reductos del poder Español. La ciudad estaba amilanada por la presencia de aquel hombre precedido de una fama de severidad que no dejaba sin castigo a todo el que hiciera demostración contraría a su dominio y poderío.  En su anterior incursión a Maracaibo había victimado a Domitila Flores; poco después en Dabajuro fusilaba al capitán Telecha, al Inglés Trainer y al Subteniente Francisco Velazco. Maracaibo conoce de Morales nuevamente con la muerte de Don Jaime Carrubí a bayonetazos en la Plaza Mayor. En Gibraltar había hecho azotar montada en un asno, a una señora de apellido Matos.

No obstante esto, Ana María Campos se expresaba sin temor y fuertemente contra los realistas; se daba a la labor de encender el fuego del patriotismo en el hogar, en reuniones públicas, en el seno de sus amistades, con dichos y arengas.

Ana María sostenía con fe que el poder monárquico sería abatido, y estableció este dilema “si Morales no capitula, monda“, Morales al tener conocimiento de la audacia de la patriota Altagraciana la hizo traer a su presencia.

El dialogo sostenido entre Francisco Tomás Morales (FTM) y nuestra Heroína Ana María Campos (AMC) lo detallamos a continuación:

FTM.- ¿Es verdad que usted se expresa mal de mi gobierno haciendo propaganda patriótica?

AMC.- He dicho, señor, que dada la justicia de los patriotas americanos, los poderosos recursos con que cuentan. La actitud imponente del intrépido Padilla y el cerco de acero que por doquier amenaza, si usía no capitula, monda.

FTM.- ¿Cuales son los recursos con que cuentan los insurgentes?

AMC.- Con el genio de Bolívar y de sus valientes paladinos, quienes, opóngase quien se opusiera triunfarán.

FTM.- Insolente, ¿como se atreve usted a proferir semejantes palabras en mi presencia? 

AMC.- Lo digo y lo repito, señor, si usía no capitula monda.

FTM.- Retráctese usted ahora mismo o la mando a castigar como merece.

AMC.- No me retracto, aunque usía me amenace con la muerte, y repíto a usía que si no capitula monda.

FTM.- Retírenla de aquí y azótenla, montada en un asno para que todo el pueblo vea lo que hacemos con los patriotas.

Comenzó entonces la trágica procesión a las 9 de la mañana, escogido como verdugo un negro llamado Valentín Aguirre. De esquina a esquina se escuchaban los azotes al mismo tiempo la voz de la víctima que a los golpes del látigo contestaba “si no capitula monda“ , con admirable valor Ana María Campos recorrió su calle de la amargura sin exhalar ninguna queja, hasta que abandonada por su verdugo sirvió de burla a la soldadesca, hecho este que conmovió profundamente a Maracaibo y provoco que sus hijos inspirados y estremecidos por este ejemplo se sintieran atraídos por el deber y voluntariamente se incorporaron a la escuadra republicana anclada en Altagracia y Punta de Piedras.

Coplas como estas se escucharon los días siguientes a este atropello

Morales Capituló

con el agua a la garganta

si no capitula monda

como lo dijo la Campos.

A Doña María Campos

señora muy distinguida

la azotaron en un burro

porque victoreo a Padilla.

En la avenida El Milagro de la Ciudad de Maracaibo, en el Estado Zulia, Venezuela esta ubicada la plaza donde se le rinde tributo a esta heroica Altagraciana.